La música y la actuación, los amores de Ana Paula
Cantar sobre un escenario, actuar frente a un público masivo y dejarse llevar por la música eran parte de un gran amor secreto que guardaba desde su niñez y que su timidez, recalca, no le permitían compartirlo.
A sus 20 años, luego de un viaje a Argentina para formarse profesionalmente, Ana Paula se dejó llevar por su ‘intuición’ y ahora vive a través de la música y la actuación.
“Esto de ser cantante siempre ha estado ahí, ha estado rondándome la cabeza pero no lo terminaba de decidir por cuestión de timidez. Yo era una chica supertímida, nerviosa, tenía miedo de subirme al escenario, de equivocarme, soy bastante perfeccionista en ese sentido”, explica Ana Paula.
Hija del cantante Nerio David Pérez y de la productora y presentadora de televisión Ana Buljubasich, Argentina marcó un antes y un después en la carrera de esta novel artista.
Durante casi dos años, la academia de Sebastián Mellino, productor de la argentina Martina Stoessel (Violetta), fue el escenario donde dejó aflorar su vocación musical.
“Yo creo que en ese momento me descubrí como artista, pude disfrutar ahora el escenario, antes simplemente lo amaba en silencio, ahora quiero gritarlo, quiero decir que es lo que me gusta”, añade.
En diciembre, Intuición marcó el inicio de su carrera artística en Ecuador.
Su productor musical William Luque, quien ha trabajado con Chenoa y Carlos Baute, compuso esta canción en género pop, cuyo video filmado en España ya tiene 283.994 reproducciones en YouTube.
“La canción, los arreglos, fueron en Madrid, los percusionistas de Chino y Nacho, en Caracas; la masterización en Londres. Realmente ha sido un producto que de alguna manera se ha pensado muchísimo, que no ha sido de un día para otro. Intuición ha sido un reto para mí”, añade Ana Paula.
En agosto, Argentina será de nuevo su destino musical. Mellino le propuso grabar algunas melodías con él, entre ellas una balada que planea presentar.
Sus estudios de comunicación escénica, en la Universidad Casa Grande, también la llevaron a nuevos escenarios. La actriz Érika Vélez fue quien le avisó sobre el casting para la producción Tres familias, de Ecuavisa, en la que interpreta a Brigitte, la recepcionista de la empresa de Armando (Andrés Garzón).
“Este trabajo como actriz ha sido fundamental porque ha despertado muchas cosas en mí”, afirma.
Es un reto un poco para mí, Intuición me sacó la parte que yo tampoco conocía de mí, que era esa mujer fuerte de carácter, decisiva. Yo siempre me di más sensible. Intuición me enseñó muchas cosas.
FUENTE: eluniverso.com