La fórmula de Cristina Kirchner y Alberto Fernández
Parque Néstor Kirchner, estatua de Néstor Kirchner a 16 años de la asunción presidencial de Néstor Kichner. Una sobredosis de nestorismo para el debut de la fórmula Fernández-Fernández, a una exacta semana de su irrupción.
Cristina Kirchner fue la primera en decir que sí a la invitación de Gustavo Menéndez, intendente de Merlo, y armador de lo que por ahora es una actividad oficial pero que, con las horas, amaga en convertirse en un mega acto.
«Están llamando desde todas las provincias, quieren venir», contó el alcalde a Clarín.
Luego se plegó Alberto Fernández que tenía, en su agenda sobrecargada, otros destinos. El miércoles a la noche estaba en duda si se haría o no: este jueves se confirmó. Menéndez dijo que estará presente la fórmula completa.
El intendente, un K ferviente, lo había planeado cuando se proyectaba otro plan: que la ex presidenta fuera la candidata.
La combinación era -y sigue siendo- irresistible para Cristina: Menéndez inaugurará un parque que se llamará presidente Néstor Kirchner, un monumento con la imagen del ex presidente y lo hará el 25 de mayo, día que asumió -en 2003- el patagónico.
Contra reloj, lo que sería una recorrida mutó: será el debut de la fórmula F-F y, también, la reaparición pública de Cristina en una tarima política, casi de campaña, aunque no es todavía tiempo de proselitismo.
Pero -según lo que se acordó en la previa- habrá escenario y discursos pero en un formato de TED múltiple: los tres, Cristina, Menéndez y Fernández, sentados y charlando. Estilo living.
Así fue la primera aparición, en modo candidato, de Alberto Fernández el lunes pasado en Santa Cruz, junto a Alicia Kirchner y su vice Pablo González.
La recorrida comenzará a las 5 de la tarde y será en el parque que el municipio de Merlo construyó a partir de la fusión de La Colonial, la quinta que oficiaba como «residencia» del intendente y un parque llamado «El Tejadito».
«La Colonial estuvo cerrada desde los años noventa cuando Othacehé la convirtió en su quinta privada, con mini golf incluido. Ahora la abrimos a los vecinos», contó Menéndez. Se refiere a Raúl Othaeché, que fue intendente de Merlo entre 1991 y 2015.
El episodio Merlo, con debut de la fórmula, pondrá a prueba roles y oficios: en particular, qué centralidad le cederá Cristina a Alberto, a quien bendijo como su heredero político y candidato.
El sábado, la senadora se replegó para despejarle el ring a Fernández.
En el acto de Merlo se mostrarán juntos y se verá la dinámica de cómo funciona el dueto.
Menéndez, que fue jefe del PJ bonaerense hasta diciembre pasado cuando cedió ese sillón a Fernando Gray, invitó también a Máximo Kirchner, que será el encargado de llevar adelante la paritaria entre los intendentes del PJ bonaerense y el dispositivo K.
Habrá, además, butacas para Axel Kicillof, Martín Insaurralde, Verónica Magario y Fernando Espinoza, que aparecen en la grilla de aspirantes a la gobernación bonaerense, la pieza que falta develar en el engranaje electoral. Como contó Clarín hay un despliegue de posiciones entre los alcaldes y La Cámpora para encarar la negociación.
Fernández no terminó de ordenar todavía su staff de campaña, señal de que no cambió la piel de operador por la de presidenciable.
Sus colaboradores arman, a las corridas, equipos y oficinas mientras el foco de la cuestión logística se mudó del Instituto Patria a las oficinas que hace años el ex jefe de Gabinete tiene en avenida Callao. (I)
Alberto Fernandez llegando a su casa con su perro, en Puerto Madero.
Gustavo Menéndez, intendente de Merlo y organizador del acto.
Fuente: clarin.com