El Ejecutivo estira a otros bonos la estrategia de diferir los pagos
Mantener dinero en el bolsillo. Esa es la consigna del Gobierno ecuatoriano para afrontar la crisis sanitaria por la pandemia de COVID-19.
Ante la presión de más gastos para atender la urgencia, el Gobierno ha debido solicitar a sus acreedores aplazar el pago de deuda.
un gasto elevado que el Gobierno ha debido hacer frente en los últimos años.
El pasado martes en la noche, el ministro de Economía y Finanzas, Richard Martínez, informó, a través de su cuenta de Twitter.
que el Gobierno ecuatoriano pidió aplazar el pago de la deuda en bonos de Petroamazonas.
Según Martínez, por medio de esa acción, el país liberará $ 175 millones este año para enfrentar la crisis sanitaria por la pandemia de COVID-19.
Los tenedores de bonos de Petroamazonas recibirían $ 5,4 millones en intereses en este año y empezarían a cobrar el capital entre enero y diciembre de 2021.
en cuotas menores a las actuales. “Esperamos una respuesta favorable de ellos”, añadió el titular de Finanzas.
El pasado 17 de abril, Ecuador consiguió la aprobación de la Solicitud de Consentimiento para diferir pagos de intereses de los bonos soberanos 2022 a 2030.
hasta el 15 de agosto de este año.
En el primer pedido del Gobierno de aplazar los pagos de bonos soberanos, la mayoría de los acreedores señalaron que aceptan la propuesta del Gobierno.
Otra fuente de liquidez para el Gobierno es los créditos de los organismos multilaterales.
El Banco Mundial, el Banco Interamericano de Desarrollo (BID).
El Gobierno pidió un crédito de emergencia al Fondo Monetario Internacional (FMI), por unos $ 500 millones.
Para mañana, 1 de mayo de 2020, se tiene prevista la reunión del Directorio del organismo para revisar la solicitud realizada por Ecuador.
El desembolso del crédito se tiene previsto luego de dos o tres días laborables, tras la aprobación del organismo multilateral. (I)
Fuente: evafm.net
