Ecuador deberá pagar una indemnización a Chevron luego que este viernes 7 de septiembre el Tribunal Permanente de Arbitraje con sede en La Haya fallara en contra del país por el caso de daños ambientales ocasionados por la petrolera en la Amazonía.
El procurador general del Estado, Íñigo Salvador, en rueda de prensa, informó que el Estado deberá cancelar un valor que será fijado en una siguiente etapa del litigio el cual, según el funcionario, seguramente será muy alto.
Salvador además indicó que la Procuraduría, en calidad de abogado del Estado, se acogerá a la solicitud hecha por la Presidencia de iniciar las acciones civiles, penales y administrativas que correspondan, contra los responsables de estos “gravísimos daños” al Estado ecuatoriano.
Esta decisión deja sin efecto la sentencia emitida por la Corte Constitucional ecuatoriana en 2011, donde ordenaba a la petrolera estadounidense a cancelar $ 9.500 millones a los pobladores amazónicos afectados durante el tiempo en que la empresa, entonces con el nombre de Texaco, operó en la zona (1964-1990).
Sería a Ecuador a quien le correspondería asumir ese pago y ya no a la petrolera, tal como lo solicitó este último al Tribunal internacional.
Chevron también argumentó ante el Tribunal de La Haya que el Estado ecuatoriano violó el Tratado de Inversión Bilateral, al no garantizarle un trato justo y equitativo y de haberse pactado con los demandantes para cometer un supuesto fraude procesal.
El secretario general de la Presidencia, Eduardo Jurado, ya había advertido ayer, jueves 6 de septiembre, de la posibilidad de que el país podía perder el laudoarbitral presentado por Chevron.
Ante esta previsión solicitó al procurador que “tome inmediatamente las acciones necesarias para sancionar a los funcionarios que generaron daño a los intereses de la República”, aplicando el derecho de repetición.
Este recurso judicial, amparado en la Constitución, traspasaría a funcionarios de la administración del expresidente Rafael Correa, la condena que se emitió a en contra del país.
Fuente: expreso.ec