Comerciantes de Pedernales aprovechan actividades del gabinete gubernamental
El gabinete itinerante que retomó este viernes el gobierno ecuatoriano en la localidad de Pedernales, en el norte de Manabí, permitió a los habitantes de esa zona reactivar su economía y dinamizar el comercio y turismo, que se vieron afectados tras el terremoto del pasado 16 de abril.
Casi dos meses después de ocurrido el movimiento telúrico, que dejó 663 muertos, 9 personas desaparecidas y 28.775 personas en albergues, el gobierno realizó nuevamente sus gabinetes itinerantes con el fin de lograr que los habitantes de la zona, epicentro del sismo, puedan recibir ingresos en su economía.
“Aquí estamos para decirle al mundo que si es grande la destrucción, grande es la pena, más grande es la esperanza”, señaló el presidente Rafael Correa en una entrevista con los medios de comunicación que se desarrolló en el parque central de Pedernales.
Comerciantes como Manuel Mocha, un ecuatoriano oriundo de Chimborazo y radicado en Pedernales hace 12 años, sacó sus productos a la calles y los instaló en pequeñas carpas que ubicaron en los espacios que quedaron libres tras remover los escombros de las construcciones que se desplomaron por el terremoto.
“Nosotros salimos otra vez para conseguir dinero. Aquí estaba mi local y aquí mismo puse las carpas hasta poder construir de nuevo”, dijo Mocha, de 40 años, a la Agencia Andes. En la pequeña carpa negra y ayudado por sus dos hijos se dedica a la venta de ropa y zapatos.
Como él, otros cientos de comerciantes salieron a las calles para ofertar todo tipo de productos. Desde ropa hasta limpieza de calzado y jugos de todo tipo para aplacar el sofocante calor de medio día.
Por ejemplo, Luciano Murillo, un taxista de 50 años, que ha vuelto a las calles con su trici-taxi y ofrece a los turistas recorridos por la zona, o los transporta del centro o la playa hasta sus lugares de hospedaje.
“Gracias a Dios los turistas empiezan a retornar a Pedernales, parece que si nos va a ir bien y podemos sacar dinero para la comida del diario”, manifestó.
Los pocos hoteles que quedaron en pie en esa zona lucían abarrotados, los funcionarios públicos y autoridades de gobierno y el personal que trabaja para ellos llenaron todas las plazas hoteleras.
Desde la víspera, se agotaron las habitaciones en los hoteles de Pedernales y de los sectores aledaños como Cojimíes, Jama, San Vicente, todas ubicadas a menos de una hora de distancia desde Pedernales.
En las calles y restaurantes el movimiento durante el día fue intenso. El sol, el calor y la amabilidad de la gente de la zona fueron propicios para que los visitantes pudieran disfrutar de la gastronomía de la costa y de las bebidas tradicionales. Ceviches, encebollados, bolones, jugos de coco, sandías, entre otras especies eran las más ofertadas.
Luis Farías, vende jugo de coco hace cinco años. Tras el sismo volvió a las calles con la esperanza de obtener ganancias para mantener a su familia. Sale a vender desde las 08:00 y si el día es bueno y hay sol, puede ganar hasta 50 dólares.
Uno de los objetivos del gobierno al realizar gabinetes itinerantes y el Enlace Ciudadano en las zonas afectadas por el movimiento telúrico es reactivar la economía y lograr que más personas visiten en lugar.
FUENTE: andes.info.ec