El animador James Corden se llevó de paseo al afamado cantante de la banda Maroon V Adam Levine.

Cantaron un puñado de sus éxitos mientras conducían por las calles de Los Ángeles, hasta que algo sucedió. Un policía los detuvo. Pero no para darles una multa, sino para pedirle a Levine que le cantara algo.

Aunque fue real, el policía afortunadamente les permitió seguir su ruta.

Levine también demostró sus dotes de malabarista, cuando se colocó varios objetos en la barbilla, haciendo balance.

Fue un Carpool bastante extenso, pero para los fanáticos de Levine es una delicia musical.

Y no conforme con la semidemostración de payaso, Levine se llevó a Corden hasta una pista para hacer un poco de “drift”, esto mientras respondía preguntas de su copiloto.

La cara del comediante valía un millón.

https://youtu.be/CZkUNPBlJIQ

Fuente: primerahora.com