China aumenta la tensión en el mar Meridional
Los guardacostas filipinos denunciaron nuevas “maniobras peligrosas” de barcos chinos alrededor
de islas disputadas entre Manila y Beijing en el mar Meridional.
durante una misión de reabastecimiento en un islote ocupado por Filipinas.
“Varios buques de los guardacostas de China persiguieron a nuestra patrullera y maniobraron peligrosamente
a unas 100 yardas (91 metros) de nuestra posición”, detalló a la agencia de noticias
EFE el portavoz de los guardacostas filipinos, Armand Balillo.
El régimen de China, en tanto, justificó este jueves las maniobras de acercamiento de dos de sus buques a
patrulleras de la Guardia Costera de Filipinas.
El portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Wang Wenbin, afirmó en rueda de prensa que los barcos filipinos
entraron en aguas para las que deberían haber perdido “permiso”.
Por tanto, y en aras de “la soberanía territorial y el orden marítimo”, los dos barcos chinos se movilizaron de manera
“profesional”, afirmó Wang.
Los hechos tuvieron lugar el 30 de junio, cuando buques chinos se aproximaron a dos embarcaciones filipinas
que participaban en una operación de las Fuerzas Armadas.
Estas patrullas fueron “seguidas, acosadas y obstaculizadas” por buques “considerablemente más grandes”, en lo que la
Guardia Costera de Filipinas ha descrito como “acciones agresivas” en un comunicado.
La misión se completó “con éxito”, pero las autoridades filipinas han señalado que China viola con este tipo de acciones la
convención internacional pretende evitar los accidentes navales
con el único objetivo de disuadir la presencia filipina en el banco de arena de Ayungin, uno de los puntos
en disputa en esta región.
“Es particularmente alarmante dado que la operación naval de la Marina filipina sólo tenía fines humanitarios”, agregó.
Realizaron peligrosamente distintas maniobras, cruzando incluso por la proa de los barcos de los guardacostas de Filipinas
y en esas distancias es muy peligroso porque puede llevar a la colisión”, dijo Tarriela, portavoz de los guardacostas para
el mar del Oeste de Filipinas, como se conoce en Manila a esta masa de agua.
Balillo señaló que con esta acción, China buscaba “intimidar y dificultar” una operación de abastecimiento en Ayungin
donde se produjo un incidente casi idéntico el pasado 28 de abril.
Por su parte, el secretario de Defensa de Estados Unidos, Lloyd Austin, ha expresado este jueves su preocupación.
Así se lo ha trasladado a su homólogo filipino, Gilberto Teodoro Jr., con el que ha mantenido una conversación telefónica
en la que ha indicado que los buques filipinos operan
“de forma segura y legal” en la zona, según un comunicado del Pentágono.
Durante la llamada, ambos han reiterado su compromiso a “seguir defendiendo el orden” de acuerdo a las normas
establecidas a nivel internacional y han reafirmado su apoyo a las comunidades filipinas en el mar de China Meridional.
El atolón, donde Manila embarrancó intencionadamente en 1999 un antiguo barco de la Segunda Guerra Mundial para
reafirmar su soberanía, se sitúa a unas 105 millas náuticas (194 kilómetros) del litoral de Palawán, en el suroeste del
archipiélago filipino y dentro del límite de 200 millas (370 kilómetros) establecido por la ONU para determinar
la soberanía marítima de los estados.
El pasado mes de abril, un equipo de la agencia de noticias AFP presenció
un incidente similar en que un guardacostas chino casi colisiona con un buque de patrulla de Filipinas
cerca de ese banco de arena.
Beijing reclama la soberanía de prácticamente todo el mar de China Meridional, en disputa con numerosos países del
sudeste de Asia como Filipinas, Vietnam y Malasia.
Según Manila, los barcos militares o de los guardacostas de China suelen bloquear los buques filipinos
que patrullan estas aguas disputadas.
El presidente filipino, Ferdinand Marcos Jr., advirtió en varias ocasiones desde su llegada al poder de que no renunciará
tampoco a las aspiraciones filipinas. (I)
Fuente: evafm.net – infobae.com