Tras los dichos del viceministro de Asuntos Exteriores ruso, Serguéi Riabkov
el primer ministro británico, Boris Johnson, instó el lunes al presidente Vladimir Putin
a “desescalar las tensiones” en Ucrania
advirtiendo que una intervención militar sería un “error estratégico” con graves “consecuencias”.
En una llamada telefónica, Johnson “expresó la profunda preocupación del Reino Unido
por la acumulación de fuerzas rusas en la frontera de Ucrania
y reiteró la importancia de trabajar a través de canales diplomáticos para desescalar las tensiones”
informó Downing Street en un comunicado.
“El primer ministro subrayó el compromiso del Reino Unido con la integridad y la soberanía de Ucrania
y advirtió que cualquier acción para desestabilizarla sería un error estratégico con importantes consecuencias”, añadió.
Los contactos entre dirigentes británicos y rusos han sido escasos en los últimos años debido a las fuertes tensiones
exacerbadas en 2018 por el envenenamiento del ex espía ruso Serguéi Skripal con el agente neurotóxico Novichok en suelo británico.
Estados Unidos, la Unión Europea y Ucrania acusan desde hace semanas a Moscú de prepararse para invadir eventualmente Ucrania
algo que el Kremlin niega.
En una reunión celebrada en Liverpool, en el noroeste de Inglaterra, los ministros de Relaciones Exteriores del G7 lanzaron el pasado fin de semana
una advertencia a Moscú:
la ministra británica Liz Truss amenazó con “consecuencias masivas para Rusia en caso de incursión en Ucrania”. (I)
Fuente. evafm,net