La Fiscalía de Perú renunció este martes a un pedido para encarcelar de forma preventiva a la ex candidata presidencial Keiko Fujimori
por comunicarse con testigos durante un juicio que se le sigue por presunto lavado de activos ligado a la constructora brasileña Odebrecht.
La fiscal Teresa Tapia le dijo a un juez de segunda instancia en Lima que desistían “del recurso de apelación”
luego que otro magistrado declaró improcedente el pedido de prisión preventiva en junio
porque la fiscalía no avisó a Fujimori que estaba incumpliendo las reglas de conducta que permitieron liberarla en 2020
y postular a la presidencia de Perú.
La fiscalía revisó la decisión este martes antes del mediodía vía virtual debido a la pandemia del nuevo coronavirus.
Advertir a un acusado de que incumple normas de conducta, en este caso conversar con testigos
es requisito clave antes de enviarlo otra vez a prisión preventiva
dictaminaron los jueces peruanos. En años anteriores Fujimori ha estado en total 13 meses encarcelada cumpliendo prisiones preventivas.
“Sí debió corresponder un apercibimiento (una advertencia) a la acusada a efectos de que cumpla con las reglas de conducta”, admitió la fiscal Tapia.
Por eso su oficina renunció a la apelación.
El juicio contra Fujimori, sin embargo, sigue vigente:
La ex candidata presidencial está acusada desde marzo pasado de liderar una organización criminal que lavó dinero de la constructora brasileña Odebrecht
y de otros peruanos millonarios que aportaron en secreto a sus campañas presidenciales de 2011 y 2016, en las cuáles perdió.
Fujimori volvió a ser derrotada en 2021 por el ahora presidente Pedro Castillo. (I)
Fuente: evafm.net